miércoles, 27 de octubre de 2010

Hay que hacer la guerra con mucho cuidado

 N.del A. Puede parecer que pedir la paz en el mundo es más propio de aspirantes a Miss Universo que de señores calvos como yo, pero no es así, no está de más que empleemos este medio para zarandearnos la conciencia a todos los que miramos pasar las noticias como si fueran tranvías. Permítanme un poco de ironía para un mundo que no tiene mucha gracia.
Vaya, que les tengo que regañar. Sí, señor, a ustedes, generalotes y ministrones, magnates y estrategas y todos los de la pandilla. A ver, ¿qué son estas noticias que leo últimamente?
 (Washington, 26 Oct. EUROPA PRESS.es) 
El Ejército de Estados Unidos niega haber revisado a la baja el número de muertes civiles en la guerra de Irak y haber ignorado los casos de abuso cometidos por las fuerzas iraquíes contra prisioneros, tal y como se apunta en los archivos de inteligencia desclasificados recientemente por la página 'Wikileaks'.
   En dichos documentos, dados a conocer el viernes, se habla de una diferencia de 15.000 víctimas mortales entre los datos oficiales del Ejército estadounidense y las cifras reales.
   El jefe del Estado Mayor del Ejército, George Casey, aseguró que los soldados entraban en las mezquitas para contar los cadáveres. "No recuerdo haber minimizado las bajas civiles", señaló quien estuviera al mando de la operación militar en Irak entre 2004 y 2007.
El Pais, edición impresa, 24-10-10
Los documentos, publicados a pesar de las presiones del Pentágono para impedirlo, permiten incrementar en 15.000 el número de civiles muertos a causa del conflicto. Iraq Body Count, una organización que intenta evaluar el número de víctimas de la guerra de los que se tiene constancia, cree ahora que en Irak murieron al menos 150.000 personas, el 80% de ellos civiles.
¿No les da vergüenza? ¡Tan grandullones y que tenga yo que regañarles. ¿No saben ustedes contar? Ay, ay, que no les salen las cuentas, que han contado ustedes de menos. Los dinerillos sí los cuentan bien, en eso no se equivocan, que bien se nota lo que les interesa, ahora lo que no son cuartos, eso no, eso lo cuentan como sin ganas, así por encima. Un más o menos: tanto. ¡Que tengan que enmendarles otros la plana,  ya les vale! Una víctima, un palito, otra víctima, dos palitos…así de fácil. Luego no les cuadran las cuentas y tienen que venir los periodistas a decirles cuántas personas se les han muerto. Todos suspensos en matemáticas.
Y que no recuerdan haber haber minimizado las cifras. ¡Ay qué cabeza, por Dios, qué cabeza! 

Además,  vamos a ver, están ustedes allí para pacificar la zona ¿No? ¿Entonces por qué se les mueren los civiles? La mayoría de las víctimas que contaban mal, almas de cántaro, el 80% son civiles, o lo que es lo mismo, no estaban allí jugando a la guerra como ustedes. Son personas a las que tienen que pacificar, no triturar ¿Pero se puede saber dónde apuntan con sus escopetas? Si tienen el parkinson o el Baile de San Vito, no apunten a nadie, pidan un destino en oficinas.

¡Qué forma de hacer una misión de paz es ésta! Van por ahí dando tiros a diestro y siniestro, sin mirár dónde disparan. Se suben a un helicóptero Apache y se piensan que así ya se puede hacer el indio. Como si tuviera gracia.
El día más largo del Ejército español
(El País, 25-10-10)
... La historia que cuentan las crónicas de aquellos días es distinta: la batalla que las fuerzas de la coalición emprendieron contra la Milicia del Mahdi acabó con la vida de decenas de insurgentes y la muerte de un soldado estadounidense, un salvadoreño y uno de los iraquíes que luchaban con la coalición internacional. Los españoles sufrieron dos heridos, pero a partir de ahí y hasta la retirada completa del país, el 21 de mayo de 2004, tuvieron que hacer frente a una realidad frente a la cual la definición de "misión de paz" se quedaba bastante corta.

Y esos otros no se escondan. Sí, les hablo ustedes, a los españoles, que están disimulando, como si les hablara a otros. Que dime con quién andas y te diré quién eres. Vaya cuajo tienen también ustedes también, hombres de Dios. No quiero ni imaginar qué les habrá pasado por allí ni lo que les pueda pasar ahora en Afganistán. Anda, anda, recójanlo todo y para casa, que ya está bien de jugar a las guerras. 

Que no es una tontería, que no queremos que esos chicos se vayan a pacificar un lunes por la mañana y ya no regresen. Las bolsas de plástico son sólo para reciclar, no para que nos devuelvan a nuestros hijos en ellas. Si les gusta, pacifíquense entre ustedes.

Háganme el favor de atender a lo que les digo, la guerra se hace con cuidado,  con mucho cuidado de no darle a nadie. Y no se molesta a la gente, lanzando bombas fuera de los sitios donde está permitido. Ah, y nada de bombitas de racimo que lo dejan todo perdido ni de minas de esas que luego se olvidan de que están puestas. Cómo se nota que ustedes no barren.
Aprendan a pacificar antes de hacerlo. Y por eso les regaño muy serio a todos ustedes señores generales, ministros y reyes, empresarios de las armas, los bancos y la construcción, extractores de petróleo, industriales de consumo, periodistas del papel y de la televisión, mercenarios, ideólogos, terroristas y libertadores, ápatas, atónitos y Socios del Rifle, utilicen  su mejor caligrafía romana, cirílica, árabe o la que sepan y su lápiz, su tiza, su bic o su Parker de oro y me copian, cien veces cada uno, el siguiente poema. 
Mario Benedetti
Letras de emergencia (1969-1973)    
Tres odas provisorias

ODA A LA PACIFICACIÓN
No sé hasta dónde irán los pacificadores con su ruido metálico de paz
pero hay ciertos corredores de seguros que ya colocan pólizas contra la pacificación
y hay quienes reclaman la pena del garrote para los que no quieren ser pacificados
cuando los pacificadores apuntan por supuesto tiran a pacificar
y a veces hasta pacifican dos pájaros de un tiro
es claro que siempre hay algún necio que se niega a ser pacificado por la espalda
o algún estúpido que resiste la pacificación a fuego lento
en realidad somos un país tan peculiar
que quien pacifique a los pacificadores un buen pacificador será

 Shiner llegó a citar un caso en el que un fusilero británico había abatido a una niña de ocho años en una calle de Basora. "Por alguna razón, el tanque se detiene al final de la calle, la niña está ahí con su vestido amarillo, sale un fusilero y la revienta", describió el abogado, quien se erigió como portavoz de los civiles iraquíes que posiblemente podrían haber sido torturados o asesinados por las fuerzas británicas.  

En recuerdo de todas las niñas de ocho años con vestido amarillo, de Basora o de cualquier lugar del mundo, que sueñan con ser princesas o sultanas mientras caminan despacito frente a un punto de mira.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Sus comentarios son bienvenidos, muchas gracias.

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...